Si la gravedad es la única fuerza en acción, una pluma y una bala de cañón seguirán la misma trayectoria si tienen la misma velocidad inicial y ángulo de lanzamiento (en la realidad, la resistencia del aire lo impide).
Como la fuerza de gravedad es constante, la aceleración en cualquier punto de la trayectoria será siempre g=9,81 m/s2 en dirección hacia abajo, como se muestra en la figura con las flechas rojas.
La dirección de la velocidad a lo largo de la trayectoria es siempre tangente a esta (es decir, que sigue la misma dirección a la curva en algún punto). Esto se muestra en las líneas naranjas.
La velocidad al volver a llegar al suelo es igual a la velocidad inicial de lanzamiento, salvo que ahora apunta hacia abajo. Incluso el ángulo respecto a la horizontal es el mismo al inicial. Dato curioso: Es por esto que las balas perdidas disparadas hacia arriba son tan peligrosas.
En la altura máxima la velocidad es únicamente horizontal. Es decir, la velocidad vertical es exactamente cero.
La velocidad horizontal se mantiene constante, ya que no hay fuerzas actuando en esa dirección. Por ejemplo, un helicóptero que se desplaza horizontalmente a velocidad constante y lanza un objeto, se moverá a la par con el objeto que cae.
El ángulo de lanzamiento que logra la mayor distancia de alcance es 45°, es decir, perfectamente diagonal.